Un tornado arrancó techos, volteó automóviles y depositó una casa en medio de una calle en el área de Nueva Orleáns, parte de un sistema de tormentas que causó daños en diversas áreas a su paso desde Texas hasta Carolina del Sur. Se le atribuyeron dos muertes.
Otros tornados causados por el mismo sistema habían azotado partes de Texas y Oklahoma el lunes, matando a una mujer al norte de Dallas y causando numerosos heridos y extensos daños, antes de proseguir rumbo al este.
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El Servicio Nacional de Meteorología confirmó que varios tornados ocurrieron el martes por la noche en el distrito de St. Bernard, limítrofe con Nueva Orleáns al sureste, y en Lacombe, al otro lado del Lago Pontchartrain. Funcionarios locales no dieron detalles sobre cómo murió la persona, pero dijeron que varias otras personas resultaron heridas.
Luisana activó 300 efectivos de la Guardia Nacional el miércoles para asistir en las tareas de despeje de caminos, seguridad y reparaciones en St. Bernard.
Estaciones televisivas transmitieron en vivo imágenes de la tormenta a su paso por el área metropolitana. Seguidamente, los socorristas trabajaban en Arabi, apenas al este de la ciudad, donde el presidente del distrito St. Bernard, Guy McInnis, dijo que el tornado causó daños significativos en un área que había sido asolada por el huracán Katrina en el 2005.
Muchos residentes sufrieron también daños el año pasado cuando el huracán Ida, de categoría 4, pasó por el área.
En Arabi, se sentía en el aire un fuerte olor a gas natural mientras habitantes y socorristas examinaban los daños. Algunas casas fueron destruidas, al tiempo que escombros y otros fragmentos colgaban de árboles y cables eléctricos. Un bote de aluminio quedó torcido en forma de C, con su motor al otro lado de la calle. Cables derribados forzaron a los trabajadores de emergencias a caminar despacio por barrios a oscuras.
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Una familia de tres miembros estaba en una casa que fue lanzada al aire por el tornado y la pareja salió de los restos buscando ayuda para su hija, que estaba atrapada adentro y conectada a un respirador mecánico, dijeron vecinos y las autoridades.
“Tuvimos un rescate — una casa que fue arrancada de suelo y cayó en medio de la calle. Una niña estaba en un respirador mecánico, su padre estaba pidiendo que los bomberos acudiesen a ayudar”, dijo McInnis. “Y ellos ya estaban allí, cuidando a la joven y ella está bien”.
