Una tripulación de la Estación de la Guardia Costera de San Juan y la tripulación del buque de investigación Neil Armstrong ayudaron al velero Windward luego que emitiera un pedido de auxilio mientras se encontraba en el Océano Atlántico el jueves, aproximadamente a 35 millas náuticas al norte de Fajardo.
Asistieron un hombre de 63 años y una mujer de 57, ciudadanos estadounidenses, después de que el hombre, que era el capitán del velero de 48 pies registrado en Stonewall, Texas, sufriera una laceración en el brazo mientras intentaba reparar los motores averiados del Windward.
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Los vigilantes de la Guardia Costera en el Sector San Juan recibieron una transmisión del velero Windward a las 3:59 a.m. del jueves informando sobre la situación. Los vigilantes dirigieron el envío de un barco de respuesta mediano de 45 pies de la estación San Juan a la posición informada por el Windward. También transmitieron una Transmisión de Información Marítima Urgente para advertir al tráfico marítimo en el área que estuviese atento. El buque de investigación Neil Armstrong respondió a la llamada, llegó al lugar y envió un equipo médico junto con un ingeniero a bordo del velero Windward. El equipo médico pudo estabilizar el brazo lesionado del hombre, mientras que la tripulación del barco de la Guardia Costera llegó al lugar.
Después de completar el tránsito de 40 millas, la tripulación del barco de la Guardia Costera se acercó al velero Windward para evaluar la situación. La tripulación del barco estableció una línea de remolque con la embarcación Windward en mares con olas de cinco a siete pies y transitó 30 millas náuticas, durante cinco horas, hasta llegar a puerto seguro en la Marina “Puerto del Rey” en Fajardo. Un barco Sea Tow se hizo cargo del remolque, mientras que la tripulación del barco de la Guardia Costera transfirió al marinero herido al personal del Servicio Médico de Emergencia que esperaba. Siguiendo la evolución del remolque, la tripulación del barco de la Guardia Costera realizó un abordaje posterior a la búsqueda y rescate del Windward sin hallazgos.
“En general, la tripulación hizo un trabajo increíble al evaluar la situación”, dijo el suboficial de segunda clase Kenneth Coates, timonel de Boat Station San Juan para el caso. “Todo lo que teníamos que hacer era poner a salvo a las personas a las que estábamos ayudando, por suerte tenían todo lo que necesitaban. Tuvieron una situación desafortunada, y estamos contentos de haber podido ayudarlos”.