De acuerdo con un estudio realizado recientemente, diversas personas se pueden ver favorecidas completamente con siestas cortas para preservar la salud del cerebro, bienestar físico y mental respectivamente.
No obstante, análisis pasados detectaron que las siestas en gran medida puede ser consideradas como un asunto perjudicial.
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Científicos de la Universidad de la República de Uruguay y del University College de Londres (UCL), dijeron: “La práctica habitual de la siesta se relacionó con un mayor volumen cerebral total, lo que se asocia a un menor riesgo de demencia y otras enfermedades”.
Siestas cortas, ¿qué tanto benefician?
Por medio de un comunicado, la autora principal Victoria Garfield, investigadora de la UCL, declaró: “Nuestros hallazgos sugieren que, para algunas personas, las siestas diurnas cortas pueden ser una parte del rompecabezas que podría ayudar a preservar la salud del cerebro” en la medida que cada persona se pone mayor.
Science Media Centre expuso lo que dijo la presidenta de la Asociación Británica de Neurociencia y subdirectora del Centro para el Descubrimiento de las Ciencias Cerebrales de la Universidad de Edimburgo, Tara Spires-Jones.
“Los resultados muestran un pequeño pero significativo aumento del volumen cerebral en las personas que tienen una firma genética asociada a la toma de siestas diurnas”. De hecho, “con esas limitaciones, este estudio es interesante porque se suma a los datos que indican que el sueño es importante para la salud del cerebro”.
La investigadora de la Universidad de la República de Uruguay y de la UCL, Valentina Paz, habló al respecto con el portal CNN. Aseveró que “el trabajo tiene algunas limitaciones”. Sin embargo, dep método usado en el estudio no están “seguros”.
Técnica
Se conoció que “los investigadores utilizaron una técnica llamada aleatorización mendeliana para analizar muestras de ADN y escáneres cerebrales de 35.080 personas de entre 40 y 69 años que participaron en el estudio UK Biobank, una gran base de datos biomédica y recurso de investigación que siguió a residentes del Reino Unido entre 2006 y 2010″.