El astro puertorriqueño Ricky Martin protagonizó uno de los momentos más memorables de los MTV Video Music Awards 2025, celebrados anoche en el UBS Arena de Nueva York, al recibir el primer premio Ícono Latino y ofrecer un espectáculo cargado de energía que repasó varios de los temas que marcaron su trayectoria global.
La ceremonia abrió con palabras de J Balvin, quien destacó el legado de Martin como pionero del “Latin pop” en la industria anglosajona. “Ricky no solo abrió la puerta, construyó el escenario completo”, expresó el colombiano, al subrayar la influencia del boricua en nuevas generaciones de artistas.
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Ataviado con un elegante conjunto que combinaba chaqueta blanca y pantalón negro, Martin arrancó un medley que puso al público de pie con clásicos como Livin’ La Vida Loca, Vente Pa’Ca, María y La Copa de la Vida, himno deportivo que incluso motivó a Ariana Grande a cantar y aplaudir desde su asiento.
El premio fue entregado por Jessica Simpson, quien recordó cómo en 1999 fue telonera de Martin en la gira mundial del éxito Livin’ La Vida Loca. Con visible emoción, el cantante de 53 años dedicó el galardón a sus hijos Valentino, Matteo, Lucía y Renn: “Todo lo que hago, lo hago pensando en ustedes y con ustedes en el corazón”, dijo.
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En su breve discurso también agradeció al público global que lo ha acompañado durante más de cuatro décadas de carrera. “Soy adicto a sus aplausos. Por eso sigo aquí, porque ustedes me inspiran a romper fronteras y mantener viva la música”, afirmó.
La presentación coincidió con el aniversario número 26 de la primera actuación de Martin en los VMAs, cuando en 1999 cantó She’s All I Ever Had y Livin’ La Vida Loca, consolidando el inicio de la llamada “explosión latina” en la música internacional.
La noche en Nueva York confirmó que Ricky Martin sigue siendo un referente indiscutible de la música latina y un embajador cultural que ha logrado unir audiencias a nivel mundial.