El exponente urbano puertorriqueño, Bad Bunny, continúa haciendo historia tras el estreno de su nuevo álbum “Nadie sabe lo que va a pasar mañana” y en la noche del sábado demostró al público de los Estados Unidos que también tiene habilidades para hacer comedia.
Bad Bunny participó en el popular programa de comedia “Saturday Night Live” de la cadena NBC. Este fue presentado por la cantante Lady Gaga y posteriormente comenzó su monólogo haciendo referencia al desaparecido programa “Sábado Gigante”. Bad Bunny también mencionó, en forma de broma, que hubiese preferido ir a otros programas de la televisión puertorriqueña como “El Show de Raymond” o “Club Sunshine”.
PUBLICIDAD
En el monólogo, Benito Martínez Ocasio, estuvo acompañado por el actor Pedro Pascal de “Narcos” y “The Mandalorian” con quien bromeó sobre su habilidad para hablar el inglés y le pidió al chileno que lo ayudara a traducir las cosas que decía en español.
Bad Bunny también hizo referencia a los subtítulos que le colocaron durante su presentación en los Grammys.
El exponente urbano también realizó un sketch donde aparece vestido del personaje “Shrek”.
Durante el programa, también estrenó en vivo el tema “Mónaco” que es el sencillo principal del nuevo álbum. Además, volvió a cantar en vivo “Un Preview” que ya había presentado en los Premios Billboard y en el “listening party” que realizó en el Coliseo de Puerto Rico, José Miguel Agrelot.
Bad Bunny cumple y regresa al trap con su nuevo álbum
PUBLICIDAD
El álbum cuenta con productores estrella como Tainy, MAG y La Paciencia, algunos de los nombres más destacados de la industria musical.
El sencillo del proyecto, “MONACO”, es una oda a los orígenes trap de Bad Bunny.
El tema combina ruidos sonoros, como coches rugiendo en la distancia, con la fórmula clásica para crear un himno trap que dominará los listados de éxitos.
Bad Bunny se nutrió de la energía del icónico Coliseo de Puerto Rico, José Miguel Agrelot, mientras estrenaba los temas de su nuevo álbum por primera vez en su isla natal. En el Choliseo, unos 16 mil fanáticos se congregaron para escuchar en primicia el álbum y fueron testigos de múltiples sorpresas que llevó el artista.
A la escenografía de la producción se sumó un escenario de 360 adornado con bloques de heno formando una pirámide y un 1970 Rolls Royce Shadow, que se ha visto en los últimos vídeos musicales de la estrella.