MIAMI (AP) — Mientras un público escaso se dirigía al LoanDepot Park para ver a los Marlins enfrentar a los Filis el viernes, un puñado de fanáticos disgustados permanecieron a las afueras del estadio, gritando de forma apasionada con la esperanza de que su mensaje fuera escuchado.
La pequeña protesta de no más de 10 personas fue organizada para transmitir el descontento de los aficionados con el rumbo de la franquicia. Había carteles con mensajes, incluido uno que exigía que el dueño Bruce Sherman venda el equipo.
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“Aquí somos solamente unos pocos, pero la mayoría de los aficionados está molesta”, dijo Luis de Armas, un fanático de los Marlins desde hace décadas y el organizador de la protesta del viernes. “Queremos seguir viniendo a los juegos, pero no si sigue siendo un equipo perdedor. Todo debido a que el dueño que nos prometió una cosa hizo otra distinta”.
Los Marlins vienen de una temporada en la que avanzaron a los playoffs, pero tienen el segundo peor registro de la Liga Nacional. Tuvieron el peor arranque de temporada en sus 33 años de historia con 0-9, convirtiéndose en el primer equipo de Grandes Ligas con esa cantidad de derrotas un año después de aparecer en postemporada.
Y acaban de ceder en canje a uno de los mejores bateadores de las mayores, el venezolano Luis Arráez.
Arráez, dos veces campeón bateador, fue negociado a los Padres la semana pasada a cambio de cuatro prospectos. Terminó octavo en la votación a Jugador Más Valioso de la Nacional la temporada pasada después de establecer las mejores marcas en su carrera en promedio de bateo (.354), imparables (203), cuadrangulares (10) y carreras remolcadas (69). Completó por primera vez en su carrera el ciclo el 11 de abril del año pasado en Filadelfia.
El intercambio ocurrió previo al partido del 3 de mayo contra Oakland. Arráez fue retirado de la alineación de Miami justo antes del arranque del juego y se le vio abrazando a los coaches de Mimi y a sus compañeros antes de salir del parque, todavía con uniforme del equipo.
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El presidente de operaciones de béisbol, Peter Bendix, dijo que el equipo recibió una oferta “que sentimos que no podíamos rechazar por el beneficio a largo plazo de la organización”, pero se negó a considerar esto el inicio de una reconstrucción para los Marlins, que previo al inicio del partido del viernes tenían récord de 10-29.
Arráez, quien fue cedido por los Mellizos a Miami a cambio del lanzador Pablo López en enero de 2023, ya había expresado su deseo de seguir a largo plazo con los Marlins, pero nunca recibió una oferta. Se fue al arbitraje salarial un par de veces y en ambas ocasiones ganaron los Marlins.
Para muchos fanáticos que desde hace tiempo siguen al equipo, fue un recordatorio doloroso de cómo han sido las cosas por casi una década.
El actual grupo propietario, encabezado por Sherman tomó el control del equipo luego de la temporada de 2017. De inmediato, se deshizo del Jugador Más Valioso de la Nacional Giancarlo Stanton, Christian Yelich, Marcell Ozuna y Dee Strange-Gordon por prospectos. El receptor estrella J.T. Realmuto fue negociado un año después.
Salvo por el ganador del Cy Young en 2022, Sandy Alcántara, los beneficios no llegaron para Miami. El lanzador Sixto Sánchez, considerado pieza central del canje de Realmuto, sigue en el plantel, pero ahora es relevista y abridor esporádico después de perderse gran parte de las últimas tres temporadas por lesiones en el brazo.