Taylor Jenkins miró el viernes una entrevista transmitida por la televisión. En ésta, la madre de Tyre Nichols hablaba de la pérdida de su hijo
“Lloré”, confesó Jenkins, entrenador de los Grizzlies de Memphis.
PUBLICIDAD
La rabia, frustración, tristeza e indignación fueron evidentes en la NBA el viernes, día en que se difundió el video que muestra la forma en que Nichols, de 29 años y padre de un niño, murió a manos de cinco policías de Memphis que le propinaron una golpiza.
Varios equipos de la liga emitieron declaraciones de apoyo para la familia, lo mismo que la NBA y el sindicato de jugadores.
Fueron palpables las emociones en la liga, como ha ocurrido muchas veces tras hechos similares de violencia perpetrados por la policía contra ciudadanos negros en los años recientes.
“Esto es una locura”, lamentó el entrenador de Miami, Erik Spoelstra, quien abrió su conferencia de prensa previa al partido del viernes hablando de Nichols, antes de que se le formulara siquiera alguna pregunta al respecto
Los agentes, todos negros, enfrentan cargos por homicidio intencional pero no premeditado, agresión agravada, secuestro agravado, conducta indebida para un policía y abuso de autoridad.
PUBLICIDAD
Y los Grizzlies jugaron un partido en Minneapolis, la ciudad donde George Floyd, otro ciudadano negro, murió después de que un agente blanco le aplastó el cuello con una rodilla, un acto que encendió protestas nacionales contra las atrocidades policiales y el racismo de las autoridades.
Ese partido transcurrió el viernes con una pesadumbre perceptible.
“Este fue un acto insensato que jamás debió haber ocurrido”, opinó Jenkins. “Al estar lejos de Memphis en este último par de días, ha sido realmente difícil manejar lo que está pasando en nuestra ciudad. Hablamos con la gente, líderes de allá, con nuestro equipo y con nuestras familias.
“Pero evidentemente tenemos que jugar esta noche un partido de basquetbol, si bien hay mucho más en lo que nos enfocamos, en volver a casa y estar allá para dar esperanza a nuestra ciudad mientras llora y guarda luto”.
Se observó un minuto de silencio antes del partido en Minnesota.
Varios equipos más, incluidos Miami, Atlanta, Cleveland, Minnesota y Milwaukee, emitieron comunicados.
“Estamos indignados por la paliza mortal que Tyre Nichols recibió de cinco agentes policiales de Memphis", manifestaron los Bucks en su declaración. “Aunque el hecho de que los agentes hayan sido acusados por sus actos atroces es un paso importante hacia la justicia, este hecho subraya la necesidad de progresar en mejorar las relaciones entre la policía y la comunidad”.
La NBA difundió su comunicado un par de horas después de que se reveló el video de la golpiza, que desató protestas en múltiples ciudades.
“Las imágenes sobre cómo se cortó innecesariamente la vida de Tyre Nichols son horrendas”, señaló la liga. “Aunque ha habido pasos hacia la rendición de cuentas en este caso, la familia de la NBA se compromete continuamente a aliarse con defensores, encargados de definir políticas y autoridades a fin de trabajar en busca de soluciones a los problemas que continuamos enfrentando”.
